Lograr los objetivos empresariales resulta fundamental para que las compañías tengan éxito; y, para que eso ocurra, los departamentos de recursos humanos deben apostar por mecanismos y herramientas eficientes que consoliden y cohesionen los equipos de trabajo.
En este sentido, el team building está cobrando cada vez mas protagonismo a la hora de gestionar el talento de una empresa. Este anglicismo, que se traduce al castellano como “construcción de equipos«, es una alternativa muy interesante a la hora de fortalecer los lazos y vínculos entre los compañeros de trabajo, con el propósito de promover la cultura de la empresa, la comunicación y, en definitiva, mejorar el clima laboral y la productividad de la organización empresarial.
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Objetivos que persigue el Team Building o las actividades para empresas
El objetivo primordial del team building o actividades para empresas es que los equipos de trabajo aumenten su productividad, alcanzado así las metas establecidas por la empresa a corto, medio y largo plazo. Para que esto suceda las dinámicas de grupo dentro de las empresas deben centrase en cuatro pilares esenciales en todo tipo de interacción humana:
- Confianza.
- Comunicación.
- Cooperación.
- Motivación.
La confianza se consigue forjando lazos que vayan más allá de las relaciones estrictamente laborales. Es decir, se trata de fortalecer los vínculos entre los empleados y lograr que la conexión entre ellos vaya más allá de una mera relación de trabajo.
Asimismo, una mayor proximidad entre los empleados da lugar a una comunicación más fluida. Es decir, se establecen situaciones en las que los integrantes de los equipos de trabajo comparten opiniones e ideas, así como diferencias que dan lugar cambios de rumbo positivos a nivel profesional.
El espíritu de cooperación se da cuando las cuestiones mencionadas se han afianzado, surgiendo de ese modo la empatía. Esto es, ponerse en el lugar de cada uno y comprender las necesidades y las exigencias que tienen los colegas de trabajo —además de las propias—, lo que da paso a la última premisa:
La motivación es, sin duda, un elemento diferenciador a la hora de evaluar el desempeño de los empleados. Habitualmente se cree que la motivación de los empleados se consigue ofreciéndoles un buen salario, pero hay factores más importantes, como cuán a gusto y valorado se sienta en su puesto de trabajo.
De hecho, la motivación está determinada en gran medida por los vínculos laborales establecidos, y la falta de la misma es un aspecto clave a la hora de que un trabajador renuncie a su empleo. Como dato revelador, el mayor porcentaje de abandonos laborales se deben a las malas relaciones con los jefes y compañeros de trabajo.
Beneficios del team building
El team building se ha erigido como un método muy eficaz para motivar a los empleados mediante actividades grupales divertidas y enriquecedoras que reportan a las empresas una serie de ventajas muy valiosas:
- Mejora considerable de la confianza entre los compañeros de trabajo.
- Aumenta el compañerismo y el compromiso entre los miembros de los equipos de trabajo.
- A través de las actividades grupales los trabajadores se sienten parte de algo; en este caso, de una empresa que les motiva y les hace sentir orgullosos de formar parte de su plantilla.
- Fomenta la productividad en el ámbito laboral.
- Las actividades lúdicas que se plantean fomentan la comunicación entre jefes y empleados, así como entre estos últimos.
- El team building sirve para agudizar el ingenio de los empleados y, por tanto, se da rienda suelta a la creatividad.
- Es una herramienta infalible para detectar fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas.
- La actividades de team building permiten determinar bien los roles de equipo. Salen a la luz los empleados con madera de líder, así como las diferentes jerarquías dentro de los equipos.
- Es una buena alternativa a la hora de resolver conflictos que se hayan originado en el ámbito laboral.
Inconvenientes del team building
- Si bien las actividades para empresas fomentan el trabajo grupal, cabe la posibilidad de que la individualidad de los integrantes se diluya o se pierda, y, por ende, sea contraproducente respecto a fomentar el afán de superación individual. Por lo que ese trabajo en equipo se convierte en protagonista para fortalecer alianzas.
- También este tipo de actividades paralelas pueden generar discusiones a la hora de planificar el reparto del trabajo o la forma de llevarlo a cabo, por citar un par de ejemplos. Cuando estas discusiones son frecuentes, y entre los integrantes se eleva el tono, todas los beneficios de la actividad quedan opacados. Por eso las actividades de Team Building tienen que tener unas normas bien claras y definidas y una supervisión constante de personal cualificado que detecte ese tipo de decisiones y las pare antes de que siquiera aparezcan.
- Puede darse el caso de que haya personas incapaces de trabajar en equipo, puesto que intentan imponer su criterio constantemente, o bien, cabe la posibilidad que haya participantes que actúen con egoísmo y dejen el trabajo más incómodo y engorroso a los demás. También hay ciertos individuos tóxicos con escaso compañerismo que, en lugar de trabajar en equipo, intentan generar enfrentamientos malmetiendo entre los compañeros. Por tanto, son una fuente constante de conflictos en cualquier actividad grupal. La clave para evitar estas situaciones y hacer ver a esas personas que su actitud no “suma” para el equipo es con un buen diseño de la actividad, en el que se prima la colaboración y el trabajo en equipo, sin olvidar el aporte fundamental en cualquier proyecto de un liderazgo individual.
Cabe señalar que la empresa contratada para llevar a cabo el evento ha de tener un peso muy importante para que todo salga acorde con los requerimientos de la empresa. Si no está todo perfectamente planificado por profesionales con experiencia, la actividad puede ser un fracaso y no reportar los beneficios que se esperan de la misma.
¿Son más las ventajas que las desventajas?
Por supuesto, una actividad en equipo de este tipo bien guiada y adaptada a las necesidades específicas de cada empresa ofrece una serie de ventajas muy interesantes que permiten mejorar el trabajo en equipo e incrementar la productividad de una empresa.
En términos generales, las desventajas vienen determinadas por aspectos relacionados con una organización deficiente o por la falta de presupuesto.
Y es que estos dos factores inciden en que el desarrollo y la participación no sean las adecuadas en este tipo de actividades en equipo, por lo que lo más probable es que no se consigan los objetivos establecidos por el departamento de recursos humanos.
¿Cómo solucionar los inconvenientes?
Para evitar que se pierda la individualidad y la personalidad propia de los integrantes de un equipo de trabajo, es necesario enfocar bien las actividades, de manera que el empleado aprenda a ser parte importante de un todo, pero sin perder su personalidad y sus particularidades y cualidades propias, las cuales enriquecen al equipo y a la empresa.
Por su parte, las discusiones que se pueden generar se resuelven fomentando una comunicación eficiente entre los integrantes de los grupos, sabiendo en todo momento que el diálogo es fundamental para lograr los consensos necesarios en un equipo de trabajo.
En cuanto a las personas poco empáticas y con comportamientos tóxicos, han de saber que ciertas actitudes egoístas son antagónicas con el trabajo en equipo, y conducen tarde o temprano a la propia exclusión. Por tanto, es necesario hacerles saber que los más perjudicados van a ser ellos mismos tanto en el plano laboral como en el personal, si no cambian su conducta. Solo así reflexionarán y comenzarán a actuar de modo diferente para intentar integrarse en el grupo.